Nos encantan las tartas saladas y esta más todavía si sus ingredientes principales son los puerros y el salmón ahumado que aportan un sabor riquisimo. Es una receta que lleva un poquito de tiempo pero vale la pena gastarlo en la cocina y en especial en este plato ya que te chuparás los dedos después de probarla .!
Ingredientes:
- 1 lámina de pasta quebrada
- 230 g. de puerros limpios, solo la parte blanca
- 80 g. de cebolla tierna
- 50 ml. de vino blanco
- 150 ml. de yogurt natural
- 100 ml. de leche de vaca
- 2 huevos grandes
- 150 g. de salmón ahumado
- sal
- pimienta blanca
- eneldo
- 3 cucharadas soperas de aceite de oliva
- 1 cucharada sopera de mantequilla
Elaboración:
Precalentamos el horno arriba y abajo a 200º C.Untamos un molde de 20 cm. con mantequilla o aceite.
Extendemos la masa quebrada y forramos el molde con ella. Presionamos ligeramente y recortamos lo que sobre. La guardamos en la nevera
Cortamos los extremos del puerro, nos quedamos sólo con la parte blanca de los puerros, retiramos las primeras capas que lo cubren y cortamos en rodajas finas.
Pelamos y cortamos la cebolla tierna.En una sartén calentamos la mantequilla junto con el AOVE, doramos la cebolleta y el puerro, agregamos el vino blanco y dejamos cocinar un par de minutos, retiramos del fuego y dejamos que se temple.
En un bol batimos los huevos junto con la leche y el yogurt, añadimos el puerro y cebolla frito y el salmón ahumado troceado. Salpimentamos ligeramente.
Sacamos de la nevera el molde y vertemos la mezcla encima. Podemos adornar con algún trocito de salmón la tarta, espolvoreamos con eneldo.
Horneamos durante 10 minutos, dejamos el horno sólo abajo, reducimos la temperatura a 180º C y dejamos cocinar durante unos 20 minutos. Hasta que al pinchar la tarta la brocheta salga limpia.
Sacamos del horno y dejamos enfriar sobre una rejilla.