El prototipo i-ROAD, es una nueva forma de transporte que ofrece más flexibilidad en entornos urbanos y que se estrenó para todo el mundo en el Salón del Automóvil de Ginebra 2013.
Flexibilidad en la ciudad
Con un peso de solo 300 kg y un ancho de 90 cm, el i-ROAD PMV(Personal Mobility Vehicle) ha sido diseñado para ofrecer una mayor flexibilidad en la movilidad en nuestras ciudades, y además colaborar a la reducción de la congestión del centro urbano y las emisiones nocivas.
Ocupando un espacio no mucho más grande que una moto, el i-ROAD puede acomodar a dos ocupantes sentados en tándem. Subidos a bordo es más similar a un coche, con la posibilidad de disfrutar de elementos como la iluminación, la calefacción, un equipo de sonido y conectividad Bluetooth con teléfonos móviles.

Tecnología
Una de las claves de los mayores niveles de estabilidad, seguridad, confort y placer asociados a la experiencia de conducción del i-ROAD es la nueva e intuitiva tecnología ‘Active Lean’ (Inclinación activa) que incorpora.
Este sistema se compone de un motor y un engranaje de inclinación montados sobre la suspensión delantera, y que están conectados mediante una horquilla a las dos ruedas delanteras. Además una ECU calcula la inclinación necesaria en función del ángulo de la dirección, el sensor de giroscopio y la velocidad del vehículo. De esta manera el sistema mueve automáticamente las ruedas hacia arriba y hacia abajo en sentido opuesto, y aplica un ángulo de inclinación para contrarrestar la fuerza centrífuga del viraje.
El sistema también entra en funcionamiento cuando el PMV de Toyota PMV se desplaza en línea recta por una superficie poco uniforme, de forma que el sistema de inclinación compensa automáticamente los cambios de la superficie de la vía para mantener el nivel de la carrocería. El sistema “Active Lean”, que no precisa de ninguna habilidad de conducción especializada, ofrece una experiencia de conducción única con toda la intensidad de una motocicleta y sin necesidad de que el propio conductor estabilice el vehículo en las maniobras a baja velocidad o en parada.

Cero emisiones
El sistema eléctrico sin emisiones del Toyota i-ROAD cuenta con una batería de ión de litio que impulsa un par de motores eléctricos de 2 kW montados en las dos ruedas delanteras. Combinando una aceleración enérgica con un funcionamiento muy silencioso, el nuevo PMV de Toyota tiene una autonomía aproximada de 50 km, después de los cuales puede recargarse mediante una toma de corriente doméstica convencional en apenas tres horas.
Con más de 10 años de experiencia en la investigación y el desarrollo de los PMV, creemos que los vehículos eléctricos deberían ser el principal modo de transporte urbano para distancias cortas en el futuro.

Fuente www.toyota.es