Este verano he tenido la suerte de viajar por Europa y probar platos tradicionales en lugares recónditos. Muchos fueron deliciosos, sin duda, pero el que mas llamo mi atención y despertó mis sentidos fue un «simple» costillar de buey. Para los amantes de la carne un delicioso plato de costillas de buey a la brasa, hechas durante 12 horas, según el Chef. Van muy bien acompañadas con verdura variada al vapor: zanahorias, esparrago, pimiento rojo y amarillo. Las costillas de buey hechas a la brasa es un plato típico de Eslovenia, y especialmente en la zona del lago Bled.
Preparación:
Se envuelve el costillar, ligeramente sazonado, en papel de plata y se entierra en abundante brasa de madera solida del tipo haya o roble durante 12 horas. Una vez trascurrido el tiempo se extrae de la hoguera, se corta sobre el mismo hueso y se salpimienta al gusto.
Obviamente es lento pero crean me, es un plato increible